
Infografía. En los días de tu juventud
Puntos clave o datos importantes
- Aprovechemos nuestra juventud. Como menciona el artículo, es una etapa de descubrimientos, promesas, desafíos y también de riesgos. Un ejemplo son las malas amistades, ya que si no las identificamos pueden desviarnos del camino de Dios.
- ¿Cómo podemos afrontar estos riesgos? Estando sujetos a nuestro Dios, a su palabra y conociendo los mandamientos. Así no es fácil caer en las tentaciones que corrompen las buenas costumbres, como lo dice el apóstol Pablo en 1 Corintios 15:33. Conocer de la palabra nos ayuda a vencer lo malo.
- ¡No cedamos ante la presión ni nos conformemos a este mundo! (Romanos 12:2). Existen diferentes doctrinas que profesan ideas erróneas, de manera que, incluso amigos y familia pueden separarnos de lo que creemos. A veces nos preguntan: ¿por qué no celebras esto? o ¿por qué a ti te va mal si crees en Dios?, etc. Pero no debemos titubear ante estos cuestionamientos.
- ¿Ayudan o perjudican? En la actualidad, las redes sociales nos pueden ayudar o perjudicar dependiendo el uso que les demos. Son de gran utilidad para dar difusión a la palabra de nuestro Dios o para llamar a más personas, pero pueden convertirse en tropiezo si no las usamos con sabiduría (1 Corintios 10:31).
- Otros riesgos en la mocedad. Como jóvenes, muchos pueden alejarse por una relación romántica en el mundo. Puede que el joven o señorita no crea en lo mismo que la Iglesia de Dios, y así envolvernos y llevarnos, olvidándonos de nuestro primer amor, como lo expresa: Apocalipsis 2:4.
- El futuro. Por último, algo que nos preocupa como jóvenes, es el futuro académico y profesional. Constantemente estamos bajo ansiedad y agotamiento, y no solo eso, a veces hasta nos podemos apartar de guardar el día de reposo como se debe de hacer; olvidando que podemos encontrar descanso en el Señor (Mateo 11:28).
